viernes, 10 de abril de 2009

UN SEGUNDO CONGELADO

Es impresionante ver esta quietud, sentir una tranquilidad excesiva en un instante donde la inspiración puede esperar, donde pensar se hace eterno y solo observar es la manera de interpretar las sensaciones percibidas en tu entorno. Empiezas a andar y cada dos pasos giras la cabeza de lado a lado absorbiendo cada imagen, cada detalle, la perfección de las sombras y sus inciertos difumines pudiendo desenmascarar la belleza de cada rosto, mirar más allá de lo carnal dentro de un limitado cuerpo. Actuar no tiene sentido, solo lo tiene observar, las miradas que junto al gesto te narra su acto y pensamiento dando lugar a la magia del sentimiento, el magnetismo de la postura elegida en esa franja de tiempo determinada. Al esquivar las hojas caídas de los arboles encajadas a distintas alturas del imperioso suelo y las nubes petrificadas en el cielo no sientes miedo, ni soledad, ni rechazo te encuentras navegando en un mar de intenciones solidificadas y disfrutando de la hermosura del momento.

No existe el tiempo, el rio de segundos y minutos no desemboca en el océano de los días, meses, años, lustros y décadas… Estas en un lugar tan distinto como desconocido pero vitalmente necesario, donde nadie respira, nadie envejece posando su magistral silueta con su verdadera naturalidad que nunca desaparecería como el verdadero amor, el amor puro, ese amor perdido y cambiado de lugar en tu memoria que cada vez que lo recuerdas sientes un escalofrío notando como mengua el corazón y como florece como si de una flor se tratase a cada latido, a cada grito del alma por cada error asumido. Sientes un hormigueo en el cerebro atónito a lo que tus ojos ven, tu mente no capta ese concepto de libertad se le escapa porque no existe ni la tristeza ni la alegría, no existen esas cadenas solo tu presencia, simplemente tu ser en el mundo sin más, donde nada sigue su curso y para ti pasa una eternidad.

Los ideales carecen de significado porque no los necesitas, esta vivencia es la escusa del romanticismo extinguido que solo aparece si crees en él y el castigo de lo banal, lo artificial mezclado con el autoengaño creado por la inseguridad adquirida en el juego psicológico al que nos vemos envueltos. El tiempo para ti está corriendo pero el Pasado, Presente y Futuro están tan olvidados como tu distanciado del destino, tu recuerdo es el ahora y por eso no sientes felicidad pero sonríes porque entiendes que eres único, tu silencio más sincero se encuentra de luto por la ausencia de conciencia y para eso… Para eso solo necesitas un insignificante segundo.

A CAPELLA

En este mundo de luces intermitentes,
De cruces inminentes,
De estuches como nuestras mentes,
De locos y dementes,
De lúcidos y inteligentes
De sentir precisamente,
De vivir concretamente
De dibujar tu universo directamente,
Expresa tu mente,
De tu persona sola entre tanta gente,
De crear tus sueños honestamente
Y tus pecados malamente, vente,
Cierra tus ojos y vente,
Valiente para romper la estabilidad de esa gente
Tan poco valiente para enfrentarte a tus miedos interiormente,
Careces de placeres,
Frutos del pasado pero no disfrutas el presente, detente,
El diablo esta pendiente,
Tu cuello y corazón ahogados constantemente,
Lucha, escucha tu interior atentamente,
Atentado a tus sentimientos antes de volar libremente,
Ponte la lente. Mira al mundo felizmente y no fríamente,
Visión del bien y el mal paralelamente y
Me veo sumergido en estos versos de repente,
Tus besos mis huesos precisamente,
No digas nada solo queremos verte, vente,
Tu dolor nos abraza amorosamente,
Descubrir las intenciones tratar a este chaval cariñosamente,
La Vida lo pone difícil seguramente,
Sentí, sufrí, dormí me sumergí para aprender correctamente,
Mis oídos escuchan la poesía de tu aura latentemente.
A quien esperas a ti o a la muerte o muerte de mentes, vente,
Riega la orquídea plantada en mi frente,
Te miro a los ojos puedo ver esas mariposas volando en tu vientre,
Te escondes detrás de las lágrimas calurosamente,
Tu mente miente, tus ojos dicen la verdad sinceramente,
Beber el agua de tu colina sonrientemente,
Moralmente somos terroristas intencionadamente
Pero se disimula suavemente, ahora lo veo claramente,
Tu sigue tu camino, cuidado, otros solo siguen la corriente,
La luna es testigo el fluido del rió lo arrasa todo rápidamente,
Manchados de tus miedos huimos disimuladamente,
Amigo me alegro de verte, buenos días, igualmente.